BONK, uno de los tokens meme coins de Solana, vuelve a estar en el radar tras una fuerte volatilidad en su precio. Conocido por muchos como el «DOGE de Solana», alcanzó los 0,000047 dólares durante el último auge de memecoins. Desde entonces, su valor se ha desplomado más de un 65 %, cotizando actualmente entre los 0,000020 y 0,000030 dólares, lo que ha reavivado el debate sobre su futuro.
A pesar del descenso, los datos on-chain revelan una actividad constante en el staking de BONK, integraciones DeFi y colaboraciones con proyectos NFT. No obstante, el sentimiento del mercado es mixto: mientras algunos apuestan por una recuperación en paralelo al repunte de Solana, otros dirigen su atención hacia alternativas emergentes como MaxiDoge, que gana adeptos por su crecimiento orgánico y una preventa discreta sin participación de fondos de capital riesgo.
First time covering $BONK ❗️❗️❗️
Smart money whales are HEAVILY bidding $BONK as the price falls deeper, an extremely healthy sign 🔥
The bonk eco is obviously the centerpiece ecosystem of Solana and it always has been, the value $BONK and it’s community bring to the table is… pic.twitter.com/TsVF7sibXT
— sk (@skmakeit) July 30, 2025
Volumen alto en medio de la incertidumbre
Durante la primera semana de julio, BONK registró más de 120 millones de dólares en volumen diario, impulsado por grandes carteras que entraban y salían rápidamente. El interés abierto en futuros del token subió un 11,5 % en tan solo una semana, señal de que muchos especulan con movimientos bruscos en ambas direcciones.
La volatilidad de BONK se ha visto acentuada por el crecimiento del ecosistema DeFi en Solana, aunque gran parte del impulso proviene del interés especulativo de inversores minoristas. Analistas destacan su alta liquidez como un atractivo para operaciones a corto plazo, aunque advierten sobre su correlación con SOL, lo que añade riesgo en mercados inestables.
Más allá del meme: utilidad en expansión
Pese a su origen como token humorístico, BONK ha consolidado su presencia en plataformas clave como los DEX Jupiter, el marketplace Magic Eden y el protocolo de préstamos Solend. Incluso se ha planteado su uso como gas en algunos rollups de Solana. En el segundo trimestre se quemaron más de 12.000 millones de tokens, lo que refuerza su carácter deflacionario.
Sin embargo, las críticas persisten. La concentración de tokens en manos de los 50 principales holders —más del 55 % del suministro total— y la falta de un desarrollo técnico sostenido despiertan dudas sobre su descentralización y evolución futura.
MaxiDoge: el nuevo contendiente
Mientras BONK intenta mantener su relevancia, MaxiDoge se perfila como la nueva promesa del mundo memecoin. Su enfoque comunitario y una preventa sin asignaciones a equipos ni inversores institucionales ha captado la atención de traders en redes como X (antes Twitter) y Telegram.
Con una oferta inicial limitada a 0,00025 dólares por token, MaxiDoge ya ha recaudado más de 124.000 dólares. Su integración con herramientas de Solana SVM promete una cotización rápida en intercambios descentralizados tras la preventa.
Lo que lo diferencia es su lanzamiento limpio: sin airdrops sospechosos ni manipulación previa en exchanges. Este enfoque ha generado optimismo en una comunidad cansada de fraudes y estafas recientes.
¿Qué futuro le espera a BONK?
La evolución del precio de BONK dependerá en gran medida de tres factores: el desempeño continuo de Solana, su adopción en nuevas aplicaciones descentralizadas y el pulso del mercado hacia los tokens meme conforme avance la llamada «altcoin season».
Si SOL supera los 200 dólares, BONK podría escalar de nuevo hacia los 0,00003–0,00005 dólares. Pero si no surgen nuevas narrativas o casos de uso, corre el riesgo de ser relegado por propuestas más frescas como MaxiDoge.
En un ciclo cada vez más competitivo, el capital especulativo tiende a moverse rápido. BONK tendrá que demostrar que es más que un fenómeno pasajero si quiere sobrevivir a esta segunda temporada de tokens meme.